En realidad no he logrado aún establecer la diciplina para leer todos eso libros que al sol de hoy me han llamado la atención, pero algo que si esta resultando costumbre es que en las comiquitas japonesas que me atraen termino encontrando mensajes de valor para el momento en el que estoy viviendo.
En esta oportunidad y desde la semana pasada he estado viendo un anime japonés llamado Twelve Kingdoms, en donde resulta que he encontrado uno de los antagonismos que más me agobian: El destino vs. la posibilidad de equivocarse.
En el capitulo que ví esta madrugada, uno de los personajes "cree" haber cometido un error al dejar que una decisión de suprema importancia fuera condicionada por sus emocionesy creencias en lugar de lo que se suponia que fuera "una revelación divina". Un poco después, al avanzar la historia, sucede que la decisión era la acertada, que la revelación divina era una metáfora que en realidad no significaba necesariamente ver luces o escuchar algo en particular y lo descubre porque "era en contra de su naturaleza inclinarse ante alguien que no fuera su verdadero maestro", como si existiera algo en sus entrañas mas allá de la razón que conociera la verdad desde el primer momento...
En el mismo anime, resulta que estos personajes, llamados allí "quirines" escojen a través de estas "revelaciones divinas" a los reyes de cada reino... pero resulta que muestran al menos dos de estos "reyes" enloquecidos y crueles... ¿cómo es que la revelación divina pone de manifiesto la maldad y la locura?
He aqui el dilema: Creer que es posible "meter la pata" para luego encontrar que en realidad era imposible hacerlo y finalmente evidenciar como aún sin haberse equivocado en la selección los resultados pudieran no ser los mejores...
Es lo mismo que creer que lo mejor es lo que sucede, viendo que hay cosas que no quisieramos que sucedieran y otras que "creemos" deberíamos estar haciendo, pero que por cualquier razón - inlcuida la pereza - no hacemos.
De acuerdo a la Cabalá, el libre albedrío es la capacidad para equivocarse... siendo que la voluntad de Dios es lo mejor para nosotros, cualquier cosa menor a eso debería ser considerada un error... Si más allá de esta realidad hay cosas "que sucederían de todas maneras" entonces podríamos hablar de un % de destino para cada uno más alla de nuestra capacidad de alejarnos de lo que deberíamos estar haciendo.
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